Los panellets son unos dulces tradicionales de Catalunya, Comunitat Valenciana y Baleares. Tienen su origen más allá del siglo XVIII, cuando se usaban como comida bendecida en celebraciones religiosas.
Parece ser que el dulce se servía durante los cultos funerarios, cuando se elaboraba comida para llevarla hasta la tumba de los difuntos. Los payeses los elaboraban en sus casas, aprovechando los frutos secos recolectados en otoño. A este dulce se les llamaba panellets de San Marcos y panellets de la Santa Cruz.
Sin embargo, como toda la cocina mediterránea, su origen es una mezcla de cultura e historia. El panellet es un dulce influenciado por la repostería árabe, dado a su base de almendras crudas y molidas, clásicas de la cocina dulce de la península arábica.
A esta masa se le añade azúcar y huevo, en algunas partes también boniato o patata, para añadir espesor a la masa- y, finalmente, se hornea con piñones, más almendras u otros ingredientes que no son tradicionales, como coco o cacao. Por tanto, se trata de un postre rico en calorías y muy dulce.
Un dulce para los Santos
Lo curioso de los panellets es que, igual que sucede con las castañas y los boniatos, se trata de un postre que se consume de forma puntual: es decir, durante el Día de Todos los Santos y el Día de Difuntos: el 1 y 2 de noviembre.
Además, en Catalunya se respeta aún la Castanyada en detrimento del extendido Halloween- que suele consistir en una cena con familia y amigos el 31 de octubre, cuando se consumen panellets, castañas asadas y boniatos.
La Castanyada está simbolizada por ''la castanyera'', una mujer mayor, de cabello blanco y pañuelo rojo, que lleva sus castañas en una cesta y las sirve en un cucurucho de papel.
Este personaje tiene probablemente su origen en el último tercio del siglo XVIII, cuando las vendedoras ambulantes vendían en la calle castañas asadas, provistas tan sólo de una olla de hierro con carbón.
Sin embargo, cada vez más, los panellets se consumen durante más días, convirtiéndose este postre tradicional en un producto de consumo que se puede encontrar en supermercados y pastelerías durante varios meses al año.
Panellets caseros, la opción estrella
Hacer panellets es algo sencillo y no demasiado laborioso. Por eso, en los últimos años, prepararlos en casa se ha convertido en una forma de juntar a amigos, enseñar a niños la tradición o bien simplemente ahorrar dinero y mejorar el sabor del postre en casa.
Por eso, preparar este postre en casa resulta una gran ventaja: los precios de los panellets en las pastelerías se disparan durante estos días y, además, nos aseguramos de preparar el postre con buenos ingredientes.
Para los niños resulta una actividad de lo más gratificante y, para los mayores, una opción ideal si prefieren preparar el postre a su gusto, usando los ingredientes que más les gusten.
Por eso, este año es el momento de preparar los panellets en casa e inculcar esta bonita tradición catalana en tu casa. Nosotros te ayudamos con esta receta :
