La harina de garbanzo también es conocida como harina chana o besan. En la gastronomía es considerada materia prima en países como la India y Pakistán, se usa en la elaboración de pan sin levadura, también en la elaboración de pakoras y productos de confitería. En la dieta para personas con régimen alimenticio de carácter vegano es ideal.
Esta harina conserva todos los nutrientes de los garbanzos y nos ofrece una gran variedad de usos.
Con ella podemos rebozar pescado, hacer buñuelos, crepes o bien utilizarlo como espesante en hamburguesas o albóndigas veganas. Lo más interesante es que esta harina puede utilizarse como sustituto del huevo si la mezclamos con agua y así elaborar rellenos de quiches o
esta receta de tortilla vegana que hicimos hace unos días. Recuerda que si deseas contrarrestar el sabor del garbanzo en las preparaciones de tortillas, puedes colocarle una pequeña cantidad de zumo de limón o de vinagre.
Entre las
propiedades de la harina de garbanzo podemos destacar que es:
- Rica en proteínas ubicándose en 22gr por cada 100gr.
- Hidratos de carbono 57.9 gr de cada 100gr.
- Omega 6 y grasas totales 6.6gr. de cada 100gr.
- No contiene gluten.
- Fibras.
- Presencia de minerales como hierro y magnesio.
- Vitaminas A, C, E y ácido fólico
Los garbanzos y, por extensión,
la harina de garbanzo es rica en proteínas vegetales, las cuales deben complementarse con otros cereales o semillas para poder obtener todos los aminoácidos esenciales.
