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Crackers de avena, trigo y sésamo negro

Las crackers de avena, trigo y sésamo son una alternativa para picar entre comidas. Existen diversas variedades, pero nunca como las de avena, trigo y sésamo. Esta receta se caracteriza por sus ingredientes saludables y muy fáciles de encontrar, de manera que no suponen un dolor de cabeza para comenzar hacerlas. Estas galletas destacan por su gran cantidad de fibras, grasas saludables, proteínas, vitaminas y minerales lo que resulta ideal para la alimentación de los más pequeños de casa. También, son ideales para controlar la ansiedad por eso debes tener siempre en la despensa de tu casa para calmar los antojos entre horas. Generalmente, este tipo de crackers se acompaña con cualquier crema untable como el hummus, guacamole o con patés vegetales como la receta de paté de tomate que preparamos el otro día, y si lo prefieres también con algo salado como los quesos, que resultan una excelente opción. Ahora que si las prefieres solas, también son exquisitas. Aquí te dejamos la receta de las mejores crackers de avena, trigo y sésamo que puedes preparar en casa, estate pendiente de las cantidades exactas para que te queden muy crujientes.

RECETA: CRACKERS DE AVENA, TRIGO Y SÉSAMO NEGRO

Ingredientes (30 galletas aprox.):
  • 40 g aceite de coco desodorizado (sin olor ni sabor)
  • 90 g de leche (puede ser de origen animal o no)
  • 90 g copos de avena finos
  • 15 g salvado de avena
  • 90 g de harina de trigo de fuerza floja
  • 10 g sésamo negro
  • 5 g de levadura química
  • 3 g sal
  • 5 g azúcar
Elaboración: 1. Calentamos el aceite de coco junto con la leche hasta que el aceite se funda. 2. En un recipiente grande mezclamos los copos de avena, el salvado y la mezcla de aceite y leche. Mezclamos bien y dejamos reposar 15 minutos. 3. Calentar el horno a 200ºC. 4. A la mezcla anterior añadimos la harina de trigo, el sésamo, la levadura, la sal y el azúcar. Amasamos hasta que quede una masa uniforme. 5. Espolvoreamos con harina la superficie donde vamos a trabajar y estiramos la masa con la ayuda de un rodillo en diferentes direcciones. Debe de quedar una masa muy fina, de unos 2 o 3 mm. Es normal que la masa no sea muy elástica y quede un poco quebradiza, no os preocupéis, es así como debe ser. 6. Cuando tengamos la masa estirada, vamos cortando piezas rectangulares (o la forma que queráis) y con la ayuda de una espátula las vamos colocando en una bandeja de horno. 7. Horneamos las galletas a 200ºC durante unos 15-20 minutos o hasta que veamos que están tostadas. ¡Que aproveche!